viernes, 15 de abril de 2011

24 DE OCTUBRE DE 1940

YO SERÉ TU MEMORIA, YO HARÉ QUE NADIE TE OLVIDE.
¡ TE QUIERO MAMA !.


En esta vida estamos de paso, solo debemos de encontrar la manera de saberla disfrutar, las cosa malas vienen solas, las cosas buenas cuando vienen, no hay que dejarlas escapar.



INOCENCIA IBAÑEZ GOMEZ
MI MADRE
EL DÍA DE SU BODA



MI ABUELA RAMONA



Nací en Zaragoza, el día 24 de Octubre de 1940, mis padres, Casimiro e Inocencia, vivían por entonces en la capital Aragonesa.
Mi padre era guardia civil y estaba destinado allí.

Estos son mis padres, mi abuela Ramona y yo con solo unos días de vida.



LOS PRIMEROS AÑOS


En aquellos años, la vida de un guardia civil no era fácil, nuestro destino cambiaba continuamente.
Después de un tiempo en Zaragoza, destinaron a mi padre a la frontera Española con Francia, a un pueblo de Girona  junto al río Ter llamado Setcases, y como pared de fondo, el Pirineo Catalán.
De allí tengo, unos recuerdos maravillosos, pese a que yo era muy pequeña, ahí cosas que no se olvidan.
recuerdo que cuando llovía, que solía ser muy a menudo, nos poníamos unos zapatos de madera llamados Zuecos, estaban hechos enteros de un trozo de madera, que hacían un ruido sobre las piedras de las calles 
que daban vida al pueblo.
También recuerdo cuando íbamos a coger avellanas con mis padres, y las metíamos en un cesto de mimbre, y un día nos salio una serpiente.


¡Esta gallina me quiso dar la tarde!, no me daba miedo, sino pánico.

Aquí estoy delante de la Iglesia


Con el Pirineo al fondo.
¡Precioso verdad!



Aquí tengo,2 años.


Mis padres, ¡ Cuantas veces habré mirado esta fotografía!


Mi padre, mi madre y yo, al principio de llegar a Setcases, con unos amigos.


La amiga de mi madre y yo.


Mis padres y yo.

De nuevo tocaba cambiar de destino, trasladaban a mi padre a Orihuela del Tremedal, un municipio de la provincia de Teruel, situado en la comarca de La Sierra de Albarracín.           
Ahí nuestro destino, si cambio para siempre.

Mis padres eran los dos, de un pueblo de la provincia de Teruel llamado Alba del Campo, un pueblo pequeño situado cerca del rió Jiloca, que todavía conserva los restos de un castillo medieval del Siglo XIII, sus 4 ermitas, La Purísima Concepción, San Cristóbal, Santa Barbara y la ermita de La Virgen de Mora, La Iglesia de La Invención de la Santa Cruz, el Campanario y sus tres palomares.
Mi madre eran ocho hermanos( Paulino, Pedro, Manuel, Mariano, Inocencia ( mi madre ), Adoratila, Generosa y Feliciana )y mi padre tres ( Vicente, Genaro, Teresa y Casimiro, mi padre )
Cuando paso lo que mas adelante os contare, yo también viví en Alba del Campo varios años.

Cuando nos instalamos en Orihuela del Tremedal, al poco tiempo fuimos cuatro, tengo un hermano 3 años mas pequeño llamado Casimiro igual que papa que nació en Alba del Campo.



Aquí estamos mi hermano, yo y nuestro tío Vicente


¡ Guapos !

En Orihula, todo era perfecto para los tiempos que corrían, para comer no nos faltaba, siempre se podía trapichear con cualquier cosa, y tirar de lo que daba la tierra, y los lujos no los nescesitabamos, eramos felices con lo que teníamos.
La guardia civil de aquellos años no tenia coches patrulla, ni motos todo-terreno para peinar la sierra como hacia mi padre, pasando frio, mojándose asta los huesos, aun conservo una manta de lana de oveja que tiene mas de 60 años.
Cuando empezábamos a adaptarnos a nuestro nuevo destino, sucedió el hecho mas terrible que marco nuestras vidas para siempre.
Mi padre empezó a sentirse mal, y mi madre llamo corriendo al medico, recuerdo que cuando llego el medico, mi padre se retorcía de dolor, y el medico lo único que hizo fue preguntarle;-¿ que comisteis ayer ?, mi padre le contesto que arenques, entonces no te preocupes, le dijo el medico, eso es un cólico.
nunca olvidare la cara de dolor de mi padre, murió ese día, de un mal diagnostico medico, mi padre tenia apendicitis, que al no operarse a tiempo se convirtió en una peritonitis, llevándoselo de nuestro lado y dejandonos en la mas triste y penosa desolación.



REGRESO A ALBA


QUE INJUSTA Y CRUEL, PUEDE LLEGAR A SER LA VIDA

De la noche a la mañana, nos quedamos huerfanos de padre, eramos muy pequeños, pero ese momento lo he revivido toda mi vida, mi hermano apenas se dio cuenta de lo que sucedía, pero mi madre casi se vuelve loca de desesperación, era incomprensible lo que había sucedido, después de haber pasado una guerra, haber sido herido de gravedad en la zona de Albarracin, haber pasado penurias persiguiendo maquis por el monte, buscando desertores, luchando contra el contrabando en la frontera, que te digan que tu marido ha muerto por no haber sido atendido a tiempo, es para volverse loco y mas.
Ya no había nada que nos uniera a Orihuela, lo que mas queríamos lo habíamos enterrado en el cementerio de Teruel, recogimos nuestras cosas, y nos fuimos los tres de allí, sin mirar atrás, con los ojos llenos de lágrimas, pero con una vida por delante que descubrir.
Con una mano delante y otra atrás, nos instalamos en casa de mis abuelos maternos en Alba, como mi padre no había muerto en acto de servicio, a mi madre no le quedo ninguna paga, y se vio en la penosa necesidad de trabajar, claro que tubo que pasar un tiempo hasta que se recupero,mientras tanto, nuestros abuelos nos cuidaron.
en casa de mis abuelos eramos seis personas viviendo,ellos, mi madre mi hermano y yo, y nuestra tía Generosa.


LA TÍA " GENE " ES LA DEL FONDO CON EL CUBO.




Paulino ( el de la boina ) con su familia, su mujer Rosa, su hija Ramona, su yerno Joaquín y su único nieto Joaquín.

A la tía Feliciana, la mandaron a servir a Santa Eulalia del Campo, en casa de Blas Lanzuela, con ellos paso toda su vida hasta que murio.


EL TÍO PAULINO


EL TÍO MANUEL




Todos los lugares en los que uno habita, dejan marcada su huella en forma de recuerdos, y Alba no iba a ser menos.
Aprendí a leer mucho antes de ir al colegio, por eso era la primera en todo, y me tenían una envidia increíble.
Me gustaba tanto leer, que deboraba los libros a la penumbra de una bombilla, o una vela que consumía por completo.
CURSO 1950-51.jpg

ESCUELAS DE ALBA
 CURSO 1950-1951

Pasamos penurias, mi madre trabajaba de sol a sol por una miseria, muchas veces freíamos las patatas con manteca y como te las comieras frías se te quedaban pegadas en la boca.
yo también negocie con el estraperlo a pequeña escala, nosotros conseguiamos trigo, y las ricas, medias de nailon o crema Bella Aurora, ¡ que tiempos aquellos! .
Aprendí a bordar, y después de hacer los deberes y las tareas de la casa, bordaba ajuares para las mozas casaderas, también borde el mio, para cuando llegara el momento de estrenarlo.
Conseguí terminar el colegio con mi graduado escolar, y gracias a Dios mi madre entro a trabajar como limpiadora a la fabrica azucarera de Santa Eulalia, mi madre me compro una maquina de coser, que todavía conservo.
Ya sabéis que tengo un hermano pequeño al que adoro, Casimiro, y al que siempre tenia que estar sacándole las castañas del fuego, porque como decía mi madre " era cabezón como el solo ".
Recuerdo que tenia los pelos tan tiesos, que mi madre como no teníamos dinero para gominas ( brillantina ), mezclaba agua con azúcar y le embadurnaba el pelo con ella, para poderlo peinar, el problema eran las moscas.
Tampoco podíamos permitirnos el lujo de visitar mucho al medico, por eso siempre había plantas del monte colgadas junto a la chimenea de la cocina, nuestra botica particular, tomillo para los resfriados, tomillo y romero para la tos, manzanilla para el dolor de barriga, té para los cólicos ( y no se equivocaban ) nunca me han faltado esas plantas milagrosas que lo curan todo.
Las cataplasmas y los ungüentos, también lo curaban todo, mi madre contaba de un aceite, que te hacia crecer el pelo,el pelo no se si crecería, pero el ingrediente principal, era un poquito difícil de coger.
Había que coger un Ardacho ( lagarto ), y freírlo en aceite, y luego untarte ese aceite en la cabeza y a esperar.
Yo no se si llego a hacer tal aceite, pero seguro que yo no lo aria.
Hasta hace cosa de unos 30 años, se podía encontrar un ungüento casi milagroso, hecho con grasa de serpiente, El Ungüento Cañizares, especialmente indicado para curar forúnculos y granos rebeldes.
En Alba, no había mas que una tienda, la tienda de la tía Juliana, donde se vendía de todo a granel, azúcar, lentejas etc, junto a las alpargatas, cuerdas, hilos, vino cualquier cosa de primera necesidad en aquellos tiempos tras una pos-guerra tan larga.
Lo que no estaba a nuestro alcance era la penicilina, eso era cosa de ricos, o de tener suerte, y os contare por que.
Mi tía Feliciana, como ya conté, desde muy pequeña se fue a servir a casa de Blas Lanzuela, en Santa Eulalia,  hombre inteligente, procedente de buena familia, con tierras de cultivo, y casas en propiedad, daba trabajo a mucha gente, mi tío Mariano también trabajo para el toda su vida en la masada que tenia en Cella.
Este hombre llego a ser alcalde de Santa Eulalia, y el primero que tubo teléfono allí.
Mi madre iba a ayudarles cuando hacían la matanza del cerdo, porque no solo mataban cerdos, sino también un buey, ovejas, era algo impresionante.
Como os decía, mi tía "Feli ", vivía con ellos, un día callo muy enferma, había cogido El Tifus, algo mortal si no se trataba con penicilina.
Con la mortaja preparada ( cuantas veces me la enseño )esperando el peor de los desenlaces, este buen hombre, Blas, cogió su coche y fue a Madrid a comprar tan preciado medicamento, llegando a tiempo de salvarle la vida a mi tía.
Con esos actos, las buenas personas demuestran lo que valen. 



YO CON 12 AÑOS

De Alba me quedan muy buenos recuerdos y muy buenas amigas, aunque el tiempo y la distancia nos alejo, no las he olvidado. 

BALBINA Y VISITA.jpg

Mi tío Manuel, fue mi tabla de salvación, aquí estoy con el, mi tía Asunción, la tía Gene y mi prima Mari en Zaragoza, en la Feria de Muestras.



Hace cincuenta y tantos años o mas, se dependía del campo para todo, era la forma de vida de los pueblos, en casa de mis abuelos teníamos gallinas, conejos y cerdos, los cuales eran alimentados casi siempre con hierbas del campo.
yo me encargaba de ir a rebuscarles comida, cogía mi cesto de mimbre, o en mi delantal y me iba a los alrededores del pueblo. Un mañana de verano, la naturaleza había pintado un cuadro de amapolas en el "prau", en un momento llene mi cesto, sin darme cuenta que dentro llevaba una víbora ( muy frecuente en ese lugar ), mi prima que venia conmigo me grito:- ¡ Tere , que llevas una bicha colgando del cesto !, yo solté el cesto, y las dos salimos corriendo como alma que lleva el diablo.
Durante una buena temporada, se me quitaron las ganas de ir a por ababoles ( amapolas ) al campo.

EL DÍA DE MI COMUNIÓN


De ese día solo recuerdo tristeza, y que todo lo que llevaba era prestado.



Había una época del año, septiembre u octubre, que era vertiginosa, la flor del Azafrán despertaba con los primeros rayos de sol, y a mis tíos les faltaban manos para esbrinar aquellas cantidades enormes de Rosa ( así se llama la flor del azafrán ).
La familia y los vecinos, todos reunidos entorno a una mesa, pendientes de esa pequeñas y aromáticas flores, pero sin perder la alegría, contando historias, chistes, cantando cuando había que cantar y tomando algún tentempié con una copita de aguardiente.


MI TÍO PAULINO Y SU FAMILIA ESBRINANDO EN LA PUERTA DE SU CASA

La vida es muy dura a veces, pero si eres optimista se compensa, aunque la falta de mi padre fue algo que no he podido superar nunca, ver a mi madre siempre dolosa por el, era insufrible, jamas quiso que otro hombre ocupara el lugar de mi padre, ella supo criarnos y sacarnos adelante, sin que nos faltara lo mas imprescindible.
Una de las cosas que siempre me ha penado es el no haber podido estudiar, mi madre me necesitaba, y por mucho que insistió la maestra, la pobre no tenia medios para pagarme unos estudios y no pudo ser,  de todas formas es mejor no mirar para atrás, no se puede recuperar lo perdido.
Como ya conté antes, aprendí a bordar divinamente, también aprendí el oficio de modista,  y trabaje en una sastrería, donde perfeccione mi habilidad con la aguja y las tijeras, todo esto me serviría para un futuro que tendría que venir.
  





OTRA VEZ NOS TENÍAMOS QUE TRASLADAR DE DOMICILIO.




Con pocas pertenencias, pero cargados de ilusión, deseando dejar tras nosotros las penurias y tristezas que nos había deparado el destino, decidimos trasladarnos a Santa Eulalia, allí trabajaba mi madre como limpiadora en la azucarera, alquilamos una vieja casa y nos acomodamos los tres en ella lo mejor que pudimos, mi hermano no  tardaria mucho en irse a estudiar al colegio de huerfanos de la guardia civil Infanta María Teresa en Madrid, una oportunidad que yo no tube por ser mujer.
En Santa Eulalia,vivían varios hermanos de mi madre, mi tío Pedro, estaba casado con Joaquina y tenían una hija y un hijo,Pedro y María, mi primo Pedro al tiempo,se caso con Aurora y se fueron a vivir a Vall de Uxo, tienen tres hijos, Aurora, Pedro y Mari.
Mi prima María además de prima fue es mi mejor amiga, os diré que también se caso, con Fermin y tienen una hija que se llama Lupe, ellos fueron emigrantes en Francia durante muchos años, pero nunca deje de querer a mi prima como si fuera una hermana.
En Santa Eulalia también vivía mi tía Feliciana, como ya conté, y un poco mas lejos,en las masadas de Cella, vivía mi tío Mariano con su mujer Angelina y sus hijos .
Me dedique a bordar ajuares para la gente pudiente, ajuares para novias y ajuares para nacimientos, y como no el mio propio.
Aun hoy conservo aquellos libros de bordados, tesoros del pasado que marcaron una época, protagonistas en mis recuerdos,como todas las cosa que significaron algo y que fueron algo importante para mi.
Fidencia, fue la modista que me enseño los secretos del arte de la costura, ella y mi vieja maquina de coser Sigma, cuantas telas habré transformado en ropa a lo largo de mi vida.


Poco a poco os iré contando todo lo que recuerdo, por diversos motivos me he tomado un descanso, os prometo que en breve reanudare estas memorias dedicadas a mi madre.



A TI MAMA

DESDE QUE NACEMOS, HASTA QUE MORIMOS, NUESTRA EXISTENCIA TRANSCURRE ALMACENANDO RECUERDOS, RECUERDOS QUE UN MAL DÍA EMPEZAMOS A OLVIDAR, QUE SE BORRAN DE NUESTRA MEMORIA, DEJÁNDONOS LAGUNAS, VACÍOS QUE NO PODEMOS INTERPRETAR, LO QUE ANTES ERA UNA VIDA LLENA DE HISTORIAS, PERSONAJES, PALABRAS, EMPIEZA A SER UNA EXISTENCIA RUTINARIA, UN REGRESO A NUESTROS PRINCIPIOS.




SOLO DESEO QUE LOS RECUERDOS DE LA VIDA DE MI MADRE, NO SEAN OLVIDADOS, Y QUE EL MUNDO ENTERO SEPA, QUE FUE Y SIGUE SIENDO EL MOTOR DE NUESTRAS VIDAS, LA ESENCIA DE NUESTRA ESISTENCIA, Y UNA ESPOSA, MADRE Y ABUELA "MARAVILLOSA"